11-04-2014 Pese a los intentos oficiales por moderar los reclamos, la huelga impulsada por Moyano y Barrionuevo le puso una presión extra a las paritarias y ahora se espera que una fila de gremios desafíe el "techo" del 30%. El impacto, sector por sector.-
Todavía no terminó el segundo paro nacional contra el Gobierno y ya empezó a surtir efecto. La medida de fuerza convocada por las CGT disidentes paralizó este jueves el transporte y complicó la actividad en varios sectores. Sin duda, los piquetes y las paradas de colectivo desiertas son la foto más elocuente de la jornada. Pero el impacto más fuerte lo recibieron las negociaciones salariales.
Pese a los intentos oficiales por instalar una pauta moderada, la huelga general impulsada por Hugo Moyano y Luis Barrionuevo le puso una presión extra a las paritarias y ahora se espera que una fila de gremios desafíen con sus reclamos el acuerdo firmado recientemente por metalúrgicos, albañiles de la construcción, empleados bancarios y mercantiles.
Ese sería el caso de Sanidad, Alimentación, Camioneros, Gastronómicos, choferes de colectivo, conductores de trenes y petroleros. Se trata de sindicatos que responden a las distintas versiones de la CGT, pero que comparten un diagnóstico negativo sobre la situación económica y amenazan con romper el "techo" del 30% fijado de hecho en los nuevos convenios.
En las últimas semanas, el Gobierno hizo un giro brusco y logró que sindicatos clave encolumnados en la CGT liderada por Antonio Caló cerraran sus negociaciones en tiempo récord, con el propósito de establecer una referencia "moderada" y desactivar la protesta de este jueves.
Sin embargo, pese a la fuerte campaña oficial contra el paro, el propio Moyano advirtió el miércoles que la protesta "ya está dando resultados" y dio a entender que trastocó el esquema de discusión salarial previsto, en beneficio incluso de los gremios más oficialistas.
"Con la presión que hemos metido nosotros, hoy están firmando 30, 31 y 32 por ciento. La división del movimiento obrero permite que no avasallen. Si no, hubiéramos firmado todos 22, como máximo 25 como quería el Gobierno", recalcó.
La influencia se hizo sentir dentro del gremio metalúrgico que, en paralelo a la medida de fuerza del sindicalismo opositor, inició el miércoles por la tarde un congreso de delegados en Mar del Plata, donde algunos sectores le pasaron factura a Caló por el acuerdo firmado a fines de marzo.
La seccional de Córdoba encabezó las críticas con un documento en el que incluyó casi calcadas las demandas levantadas por el paro nacional, reclamó que se "implementen políticas activas que hagan la reducción inmediata de la inflación", solicitó una cláusula gatillo y denunció queel Gobierno "está quitándole derechos a los trabajadores".
Paritarias post paro
Con las brazas del paro todavía calientes, el Sindicato de la Industria de la Alimentación (STIA) es uno de los primeros que abrirá en las próximas semanas un nuevo round de la pelea salarial y pedirá un aumento del 40%, el más alto desde que comenzaron las negociaciones este año.
El titular del gremio, Rodolfo Daer, dijo a iProfesional que las aspiraciones de los trabajadores "están por arriba del 30%" y planteó que el salario inicial de la actividad tiene que ubicarse en9.000 pesos. Hoy se encuentra en $6.200.
Con estos objetivos en mente, el sindicalista convocó a un plenario de delegados para el 15 de abril, antes de que venza el convenio a fin de mes. Daer integra la CGT de Caló y respalda al Gobierno, pero se encuentra presionado por las comisiones internas "combativas" de zona norte, que en la multinacional Mondelez (Kraft) votaron un alza del 40% y este juevesparticiparon activamente de la huelga.
Otro de los gremios encolumnados en la central obrera oficialista que desafiará los acuerdos cerrados por sus pares es el de Sanidad. Con más de 250.000 afiliados, el sindicato liderado por Carlos West Ocampo y Héctor Daer ya dejó en claro que el Gobierno puso en marcha un "ajuste" y rechazan que el salario sea el "ancla de la inflación".
Por ello, desde la cúpula del gremio, que integra el grupo de los "Gordos", advirtieron en agosto que van a ir por un aumento de "entre el 30 y el 35%", marcando un distanciamiento de la pauta oficial. "Nosotros firmamos siempre por arriba, hay tres gremios que no perdieron en 2013: Sanidad, Camioneros y Alimentación", dijo este medio Daer.
En el sector del transporte, los choferes de colectivo (UTA) y los conductores de trenes (La Fraternidad) deberán iniciar sus paritarias en mayo, luego de acordar sumas puente de $1.100 y de hasta $2.500, respectivamente, ante la resistencia a aceptar la referencia sugerida por la cartera laboral.
Ambos gremios integran formalmente la CGT alineada a la Rosada, pero en los últimos tiemposse distanciaron de Caló, tras los cortocircuitos con el Ejecutivo, y se acercaron a Moyano, con quien finalmente acordaron impulsar el paro de este jueves.
Los colectiveros creen que la tanda de acuerdos cerrados en los últimos días "responden más a un ordenamiento político que a la necesidad de los trabajadores", y se mostraron reacios a aceptar un aumento menor al 29%, en línea con los ferroviarios de La Fraternidad.
Sin embargo, el plato fuerte llegará en junio cuando los camioneros inicien la discusión salarial. El propio sindicato, a través del secretario adjunto, Pablo Moyano, anticipó que reclamará un incremento de entre 35% y 40%, y les pidió a los empresarios del transporte de cargas que "vayan afinando el lápiz”" para esa negociación.
En los últimos días, el padre del sindicalista y líder de la CGT opositora arremetió contra Caló, al considerar su rol "vergonzante" y pedirle que vaya a "preguntar" a sus representados del sector metalúrgico "si están contentos con el aumento que sacaron" en las paritarias recientes, que el Gobierno anunció como de 27,25%, mientras la UOM sostuvo que fue de 29,6%, a cobrarse en dos tramos.
Moyano aseguró que "todos los gremios son conscientes de que la inflación ha superado el 30% en los últimos meses y firmar por debajo de ese porcentaje es quitarle poder adquisitivo al salario del trabajador". No obstante, reivindicó el acuerdo alcanzado por los bancarios que obtuvieron una suba del 29% en un tramo, más una suma fija.
El titular de los gastronómicos (Utghra), Luis Barrionuevo, también deberá sentarse a discutir en junio. Pero a diferencia del camionero, el también titular de la CGT Azul y Blanca elevó el pedido de aumento al 40%, con la posibilidad de reducir la cantidad de tramos y agregar una cláusula de renegociación a mitad de año.
"La devaluación instrumentada en enero (del 20%) hizo que todos estén pendientes de los aumentos salariales en los primeros meses del año, pero las cámaras empresarias son reacias al planteo que realizó la Uthgra a nivel nacional", de un aumento por encima del 30%, reconocieron desde el sindicato.
* ver:http://www.iprofesional.com/notas/184464-El-paro-de-Moyano-desafa-el-techo-Cal-y-marca-una-nueva-etapa-para-los-acuerdos-salariales-que-vienen.-
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